"Muéstrame el mar. Hazlo en esos días en los que me sienta solo; tan temprano como el amanecer lo permita.
Quiero sentirme único al ver mis huellas en la arena, al recibir el sol acariciando mi piel. El primero en respirar su sal y sentir la humedad.
Muéstrame el mar, como si fuera tu primera vez. Ríe conmigo tan fuerte como las olas rompen el silencio mientras corro hacia ellas bajo la lluvia.
Muéstrame el mar, en un día de invierno".
Chiloé, Chile | El hijo del pescador.
Edición limitada de 10.